No pretendemos obtener productos con características diferentes. Queremos elaborar exactamente el mismo vino, pero que cuando sea expuesto a la luz no genere el defecto organoléptico conocido como gusto de luz
- ¿En qué consiste la aportación y la actividad investigadoras de VITEC en el proyecto?
La prevención de la aparición del gusto de luz en vinos blancos y rosados de calidad es una prioridad para el sector vitivinícola. Es fundamental elaborar productos con una calidad estable y garantizada hasta llegar al consumidor final, superando las condiciones de logística y comercialización, que no siempre son las más adecuadas.
En este sentido, hemos trabajado con las bodegas participantes en Retasteled estudiando vías de elaboración que permitan obtener productos con la misma calidad que la actual, pero con una menor concentración de los precursores que generan el defecto organoléptico. Hemos trabajado en dos direcciones: en la baja generación de precursores (modificando las condiciones de fermentación, en especial levaduras y nutrición) y en el desarrollo de procedimientos de eliminación de estos precursores (afectando el mínimo posible la calidad del vino). A la vez, el otro gran reto del proyecto ha sido el desarrollo de una fuente lumínica que no genere el defecto de gusto de luz.
- ¿Qué está suponiendo para VITEC colaborar en un proyecto de esta envergadura?
La verdad es que estamos acostumbrados a trabajar en proyectos de esta envergadura, aunque cada proyecto es diferente, ya que cada uno cuenta con objetivos específicos diversos y, sobre todo, con intereses, empresas y profesionales diferentes. En el caso de Retasteled, estamos muy satisfechos con el consorcio que hemos logrado organizar, así como de haber abordado de forma conjunta este reto enológico y tecnológico.
- Desde el plano de la investigación y la innovación ¿cuáles podríais decir que son los objetivos de Retasteled para VITEC?
Por una parte, la creación y validación de protocolos de elaboración que permitan poducirvinos en la misma línea de calidad de las bodegas, pero con una menor cantidad de precursores. ¡Este objetivo es complicadísimo! No pretendemos obtener productos con características diferentes. Queremos elaborar exactamente el mismo vino, pero que cuando sea expuesto a la luz no genere el defecto organoléptico conocido como gusto de luz. Este objetivo ha permitido a las bodegas aportar muchos datos y elaborar vinos experimentales para evaluar cual era la dirección correcta.
El segundo de los objetivos ha sido participar en la validación de las nuevas fuentes lumínicas, probando cada uno de los prototipos, exponiendo los vinos concada uno de ellos y evaluando si se alteraban o no sus características.
- Actualmente, ¿en qué parte del proceso investigador os encontráis? ¿Qué objetivos se han logrado ya?
Actualmente nos encontramos en la recta final. Estamos pendientes aún de la vendimia de 2021 para terminar de realizar las últimas pruebas de elaboración y definir los itinerarios enológicos óptimos, así como un prototipo de fuente lumínica para ser chequeado en las instalaciones de las propias bodegas.
- ¿En qué consiste vuestro trabajo?
Nuestro trabajo ha consistido en la redacción del proyecto, la definición de las posibles líneas de trabajo, la coordinación entre los socios y, finalmente, en la aportación de datos analíticos e ideas para la consecución de cada uno de los objetivos del proyecto, a medida que este avanzaba.
- ¿Cómo coordináis vuestro trabajo con los demás miembros del consorcio?
Inicialmente, como en muchos otros proyectos, mediante reuniones iniciales presenciales, definición de planes de trabajo específicos para cada grupo de tareas, comités técnicos de seguimiento del proyecto etc. Sin embargo, en este proyecto nos hemos topado con el COVID-19… pero, por suerte, no ha afectado a su desarrollo , pero sí a la comunicación. El número de videollamadas se ha incrementado, al igual que las catas online, etc.
- Una vez finalice el proyecto ¿cuál consideráis que habrá sido la principal aportación investigadora e innovadora Retastaled?
Consideramos que habrá dos aportaciones principales. Por una parte, el conocimiento que se generará para que los vinos en el momento de su salida de bodega sean mucho más estables frente a la aparición del gusto de luz, conservando la calidad deseada. Y por otra. que el sector disponga de una fuente lumínica que no altere las propiedades organolépticas de los vinos.
- ¿Estáis habituados a participar en proyectos colaborativos de I+D como este? Según tu criterio, ¿qué es lo más positivo y significativo que se obtiene al participar con otras empresas en este tipo de iniciativas ?
Sí, estamos habituados a participar en proyectos colaborativos como Retasteled. Hay una parte técnica importantísima en la que tanto las empresas como los centros de investigación intercambiamos conocimiento y aprendemos muchísimo. Pero siempre me gusta destacar lo mismo: lo mejor son las personas con las que trabajas. Es siempre muy enriquecedor y, normalmente, estas relaciones se prolongan una vez finalizado el proyecto.